viernes, 4 de mayo de 2012

Mi confrontación con la docencia.


Mi confrontación con la docencia

El presente escrito es resultado de las actividades del Módulo 1 Práctica docente y Reforma Integral de la Educación Media Superior, Unidad 1. La aventura de ser maestro y presenta una breve semblanza de cómo me convertí en profesor, posteriormente un breve análisis de la lectura “La Aventura de Ser Maestro” de José Manuel Esteve; ambos apartados han sido enriquecidos con los cometarios de mis compañeros de grupo vertidos en el andamio cognitivo Lo Que Compartimos.

Mis inicios.

Termine el bachillerato  en 1988 y tenía muy claro que quería ser maestro de español en preparatoria pero me encontré con que ni en la Escuela Normal Urbana Federal del Istmo ni en la Universidad Pedagógica Nacional,   no había más licenciaturas que la de educación primaria y secundaria, así que pregunte a mis maestros  qué habían estudiado; ninguno estudio para maestro. Todos eran licenciados o ingenieros en algo.

Hasta el momento no me había preguntado qué motivos tenia para querer ser maestro, ahora la respuesta aparece en las lecturas que hemos hecho: en ese momento ser maestro tenía un cierto status, era respetado y se le consideraba una persona culta al extremo, inteligente y la encarnación de muchos valores y yo quería ser considerado de esa forma.

Así que decidí estudiar la licenciatura en informática en el Instituto Tecnológico del Istmo; en el 91 hice mi servicio social en el Centro de Bachillerato Tecnológico industrial y de servicios numero 25 (CBTis No. 25) de Salina Cruz dando clases a algunos maestros y justo en ese año se abre la especialidad de técnico en programación por lo que me pidieron que hiciera mis prácticas profesionales dando clases a los alumnos de la nueva especialidad y haciendo pequeños sistemas; estuve ahí un año, entre el servicio social y las prácticas profesionales, y me gustó mucho la docencia. En octubre 92 me llamaron del CBTis por que no tenían maestro para la nueva especialidad y con la promesa de ser contratado antes de seis meses me quede con las clases. Me contrataron en abril 93.

En 1998 tuve la oportunidad de estudiar la maestría en ciencias de la educación, con esto creo que mejoró mi práctica docente y me dio la oportunidad de dedicarme a la docencia a nivel superior. Trabajé en la Universidad Autónoma Benito Juárez de Oaxaca en la licenciatura en enseñanza de lenguas extranjeras de 2001 a 2007 y del 2009 a 2011 en la Universidad del Golfo de México, campus Salina Cruz en la licenciatura en pedagogía y dando clases de inglés.

Termine la maestría en el año 2000 y hoy ya me considero obsoleto.

Como docente, en ambos niveles, creo que es importante preparar a mis alumnos lo mejor posible para que puedan lograr aquello que desean, siempre y cuando sea realista y ético;   me siento muy satisfecho de verlos trabajando de forma digna y contentos y más aún cuando me saludan y me cuentan sus logros;  esto es lo mejor de la EMS ya que los ves llegar en su primer día siendo unos adolescentes que no saben lo que quieren, los ver irse siendo jóvenes con muchas expectativas de su vida futura; les ayudas a elegir su carrera y hacer un proyecto de vida.

¿Motivos de satisfacción? Uno diferente en cada egresado que tiene un plan de vida que va realizando poco a poco.

También el reconocimiento que me hacen mis alumnos al admitir que a pesar de todo lo que les exigí (puntualidad, responsabilidad, trabajos de investigación y tareas) han disfrutado la clase y han aprendido algo que pueden aplicar en su cotidianeidad; alumnos que se han vuelto críticos y que  no sólo aprendieron los contenidos procedimentales o facticos de la materia, sino también los actitudinales; estos últimos incluso los aprenden aun cuando no es nuestra intención que los aprendan.

Motivos de insatisfacción, también los hay aunque solo dos se relaciona con la docencia:

1.    La deserción escolar que es causada por infinidad de motivos, muchos de los cuales no podemos eliminar, pero si prevenir con la orientación psicológica que el alumno necesita para poder tomar decisiones correctas y asertivas.

2.    Falta de infraestructura, en particular equipos de cómputo actualizados ya que con 20 pc’s  debo impartir clase a grupos de 50 alumnos. Pero esto más que ser un gran problema lo considero un reto; por un lado mis alumnos practican ensamblando y desensamblando equipos obsoletos pero saben que lo importante es la competencia que adquieren ya que aunque practicásemos con los equipos más nuevos, esos equipos serán obsoletos en algún momento. También me doy cuenta de que el problema es generalizado ya que muchos docentes, en diferentes subsistemas y estados pasamos por lo mismo

De cualquier forma trato de hacer  lo mejor para mí y mis alumnos con los recursos que tenemos, dejando a un lado la práctica docente de los demás y centrándome solo en la mía. Ahora sé que esta no es una actitud correcta pues esto dificulta el trabajo en equipo que todos los docentes debemos hacer con un grupo determinado, pero es difícil dejar a un lado viejas rencillas, egos mayúsculos y divisiones causadas por la política sindical y los subgrupos al interior de la escuela. Difícil, más no imposible.

La Aventura de Ser Maestro.

 En la ponencia hecha por el autor se identifican cuatro dificultades que los docentes deben sortear al inicio de su práctica docente, estos son:

1.    Elaborar una identidad profesional propia. Señala la importancia de no idealizar la profesión docente, cosa que a mí en lo particular me sucedió y por tener un concepto idealizado de lo que es ser docente quise estudiar en la ENUFI; afortunadamente también tengo vocación y espíritu de servicio y esa identidad docente se ha formado tomado los mejores rasgos de todos aquellos maestros que tuve y tengo a mi alrededor, pero también entiendo que no es una identidad terminada sino en constante evolución, con cada grupo, con cada generación algo nuevo le es dado.

2.    Dominar las técnicas básicas para ser un buen interlocutor. Aspecto básico para poder comunicar nuestro objeto de conocimiento, pero no suficiente para poder lograr el aprendizaje; estas técnicas las entiendo como herramientas para “vender” al alumno un objeto de aprendizaje, pero al igual que pasa con un producto, si no nos gusta, dejamos de consumirlo. Además de técnicas de comunicación y uso de TIC’s debe haber un contenido que a los alumnos les parezca interesante, aplicable y sobre todo accesible.

3.    Adaptar los contenidos al nivel de conocimiento del alumno. ¡Esto si me fue difícil entenderlo hace 18 años! Y usaba los mismos textos,  ejemplos y ejercicios que vi en la carrera y trataba a mis alumnos como “tontitos” por no entenderlo; ahora prefiero parecer yo tontito con ejemplos muy simples que poco a poco van subiendo de grado dificultad, pido y doy explicaciones con peras y con manzanas pero tengo la seguridad de que ha quedado entendido. En palabras de E. Litwin (cifra Cabo) me debo “…preguntar si lo que se enseña es racionalmente justificable, digno de que el estudiante lo conozca, lo crea o lo entienda”

4.    Disciplina. ¡disciplina! ¡Qué gran problema! No paso lista, no exijo uniforme, no quito piercings visibles y todo eso me piden que haga para que los adolescentes parezcan adultos de 1950. Trato de razonar con ellos explicándoles que la cadena que traen al cuello o el piercing en la ceja se puede atorar en la tarjeta madre de la pc y echarla a perder, además del riesgo de electrocución si el equipo esta encendido. Explicando también que ellos son los que se benefician o se perjudican con cada una de las acciones que realizan, que no benefician ni perjudican a papá o a mamá; les pido pues que hagan lo que quieran siempre y cuando sean responsables de las consecuencias, buenas o malas, de sus actos y que no esperen que vaya papito o mamita al rescate pues si quieren ser tratados como adultos, se deben portar como tal.

Debo admitir que he tratado de sortear esas dificultades lo mejor posible y 18 años después aún hay cosas que considero que he logrado a medias. Tal vez mis acciones no sean perfectas pero son lo mejor que tengo en este momento.

A manera de conclusión

Siento que actualmente mi práctica docente aunque satisfactoria, puede ser mejor y pienso “si tan sólo hubiese hecho…” “si tan sólo hubiese conseguido…” y al preguntarme ¿Cómo puedo mejorar? La respuesta que me doy es siempre la misma: ¡SIGUE PREPARANDOTE!

Ahora tengo claro que debo prepárame en tres aspectos básicos:

·         Mi área de formación profesional (informática e inglés) en la que cada día hay cosas nuevas y es difícil estar a la vanguardia, pero intentarlo es lo mínimo que puedo hacer.

·         En pedagogía y didáctica, porque de nada sirve que yo sepa mucho si no se enseñarlo.

·         En psicología, pues trato con adolescentes que buscan una identidad y consolidar su propia personalidad en medio de todas las demandas culturales y sociales que el medio les hace.

Y una vez que tenga todos estos conocimientos aplicarlos con una óptica crítica y reflexiva, contextualizando siempre mi trabajo con cada grupo.

Creo que es la preparación la mejor forma de evitar el burnout docente, eso y una actitud positiva hacia la vida, aceptando que no podemos controlar todo lo que pasa en nuestro entorno pero si determinamos como nos afecta, si nos construye o nos destruye.

Debo además de integrar un poco más del aspecto actitudinal, o al menos ser más consciente de los valores que trasmitimos; estos valores, al igual que los contenidos, deben ser aplicables a la vida diaria y sobre todo mis alumnos deben vivenciarlos junto conmigo.

Sé que aún tengo mucho que aprender y me falta mejorar mucho como ser humano y como docente, pero también sé que tengo el deseo de hacerlo y de lograrlo, el deseo de convertir mi práctica docente en una praxis docente, entendiendo praxis como la unión entre teoría y práctica, una teoría analizada y una práctica crítica con la finalidad de educar adolescentes competentes, críticos y con un proyecto de vida propio. Es decir, aplicar a mi práctica docente conocimiento en la acción, reflexión en la acción y reflexión sobre la acción y sobre la reflexión en acción (Schön, Cifra (Cabo)) para convertirla en una praxis educativa que me resulte revitalizadora.

2 comentarios:

  1. Hola Maestro Manuel David,

    A veces si trabajamos contra corriente, sobre todo cuando carecemos de una infraestructura adecuada y de equipo insuficiente para los estudiantes, donde dificilmente alcazaremos las metas planeadas al 100% pero aún así hay que continuar. Desafortunadamente nos enfrentamos a esta realidad y pues solamente nos queda desarrollar estrategias que nos permitan trabajar con los recursos disponibles. Lo felicito por su blog, por su entrega en todo lo que hace y por compartinos sus experiencias.

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  2. Hola compañero Manuel.
    Espero que esta vez si este bien la menara en como se debe publicar un comentario.
    Por otro lado creo que eres un ejemplo de la tenacidad y perseverancia, pues siempre tratas de ir un paso adelante de los demás, es muy claro que disfrutas la docencia como muchos de nosotros, en las limitantes que mencionas en tu escrito yo creo que son normales, aunque a mi parecer no estoy de acuerdo del todo, pues por tu desempeño denotas que eres una persona preparada que se preocupa el día a día por sus alumnos, sin embargo, como dices hay que SEGUIRNOS PREPARANDO, me incluyo por que así debe de ser.
    Saludos y nuevamente felicidades por el gran avance.

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